lunes, 2 de noviembre de 2009

No hay dos sin tres. Once minutos





Acabo de terminar mi segundo libro en italiano. Casualmente, los que tengo más a mano son de Paulo Coelho, lo que me está permitiendo darme una pequeña sobredosis.
Once minutos está basado en algunos hechos reales y nos ofrece una versión singular de la sexualidad entre humanos y otros que dicen serlo.
El sexo y su parte espiritual. El sexo que nace después de tanto banalizar. Que surge espontáneamente como un acto divino y espiritual entre dos cuerpos sin apenas entenderlo...
No hay dos sin tres y me intento decidir entre "Verónika decide morir" o " El Camino de Santiago"  para cerrar esta trilogía y pasarme a un verdadero autor autóctono.
¿Alguien me ayuda?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Estimada señorita:
Es mi ilusión invitarla a que siga a lo largo de estas semanas, a través de mi humilde blog (www.molestoluegoexisto.blogspot.com), el ensayo que realizo acerca de la dulce obra escrita por el genial Saint Exupery; El Principito. Esta breve creación tiene mucho de profundo. Pero no se trata de una profundidad plomiza, suprametafísica o hiperintelectual, ¡para nada! Todo lo contrario, el mensaje del principito es sencillo, directo y preclaro.
Mi objetivo es que juntos saquemos el máximo jugo a la brillante creación del francés… sin duda esta apasionante labor nos servirá para alegrar nuestros espíritus y crecer un poquito más.
Un animoso saludo desde la isla de Gran Canaria.