domingo, 3 de febrero de 2008

Cine relax

Me parece muy bien que todo el mundo esté por la calle chupando charcos y celebrando a voz en grito los Carnavales.¡Ojalá lo estéis pasando estupendo!
Yo estoy encerrada en casa intentando estudiar debajo de mi manta de cuadros y he salido como mucho para ir al cine ayer y ver una peli. El amor en los tiempos del cólera.
Los críticos-frikies-entendidillos dirán probablemente que es una basura, comercial total y un millón de estupideces más ( respetables, desde su punto de vista). A mí me ha encantado.( debe ser que soy un individuo normal del pueblo llano y también bastante sentimental)
No sé si iba predispuesta a que me gustase ( por basarse en una obra de García Márquez, aunque reconozco que ésta no me la he leído) o es que toda la película gira en torno a la exaltación de un amor visceral que me atrapa y me hace abstraerme tanto en las últimas escenas que estoy a punto de sentir las lágrimas deslizándose por las mejillas.
He de reconocer que la actriz no me gusta nada. Me parece inexpresiva. Eso sí, Bardem, en este papel creo que da la talla. No cuando sale de joven, con su cara de simio particular ( me parece un ser prepotente y desagradable donde los haya, a parte de tener un físico anormal y poco atractivo), sino caracterizado, que es donde empieza a cobrar vida su personaje.
La historia de amor es un tanto peculiar e interesante. A mí me hace plantearme una serie de cuestiones.
¿ Es tu cuerpo lo mismo que tu alma? ¿ Está tu alma dentro de tu cuerpo? ¿ O va por libre? ¿ De dónde sale el amor? ¿ Cómo sabemos qué es eso? Nuestros cuerpos pueden ser felices sólo con sexo y ...¿ nuestro corazón? ¿ Puede ser feliz nuestro corazón ?...


1 comentario:

Ana dijo...

Yo creo que alma y cuerpo van por separado, aunque el cuerpo sufre las consecuencias de un alma malherida. El amor que sale del alma duele o gratifica de una manera que nunca podrá hacer el amor que sale del cuerpo. Cuando el amor nace del cuerpo termina por acabarse, llega un día en que ya no te produce la misma sensación y buscas otro cuerpo. Cuando sale del alma nunca se termina; puede que se transforme, que se pierda el cuerpo, pero sigue ahí. Quizás no a todas horas, quizás cada vez con menos frecuencia, pero sigue y no se va. Y sabemos que pasará un año y nuestra vida será diferente y habrá otras personas a nuestro lado, o no, pero seguirá, habrá un momento en el que volverá a darte un vuelco el corazón al recordar, inevitablemente. También hay amores que nacen del cuerpo y el alma, pero esos suceden apenas una vez en la vida. Esos se quedan para siempre y hacen que busques cuerpos y cuerpos escondiendo en realidad el deseo de encontrar su alma en alguno de ellos aún sabiendo que, aunque puede haber más de un alma gemela, no hay dos almas iguales. Yo apenas recuerdo algunos cuerpos... pero hay un par de almas, quizás tres... que no me abandonan.